Cuando hablamos de «quiebra de empresas en Chile», abordamos un tema que va más allá de las cifras y los procedimientos legales; tocamos historias de lucha, innovación y, a veces, de desafíos insuperables. La quiebra no es solo el cierre de una empresa, es el final de un sueño empresarial y el comienzo de un camino de reinvención. La Ley 20.720, que regula los procedimientos de liquidación en Chile, no es solo un conjunto de normativas legales, sino también un faro que guía a las empresas en momentos de adversidad.
Este artículo se adentrará en los detalles de la Ley 20.720 para empresas con problemas económicos, desglosando sus disposiciones con el fin de ofrecer un entendimiento claro y detallado de los procesos de liquidación general y liquidación simplificada. A través de este análisis, buscamos no solo informar, sino también ofrecer perspectivas y orientación a aquellos que se encuentran en medio de, o enfrentan, la posibilidad de una quiebra empresarial. La quiebra no es el fin de la historia; en muchos casos, es un capítulo crucial que lleva a un nuevo volumen en el viaje empresaria
Liquidación Voluntaria de Empresas
Lo primero que tenemos que entender, es que nuestra legislación contempla, como última herramienta para solucionar deudas de una empresa, a la liquidación, conocida también como «quiebra». Esta corresponde a la típica situación donde se entregan los bienes que se tienen a cambio de dejar las deudas en cero.
Para el caso de las empresas, esta liquidación toma dos formas: Una dirigida a grandes empresas y otra dirigida a PYMEs.
Liquidación Voluntaria de Grandes Empresas
La liquidación voluntaria es un proceso legal que permite a una empresa en dificultades financieras cesar sus operaciones y liquidar sus activos de manera ordenada a cambio de dejar sus deudas en cero. En esta sección, profundizaremos en los artículos 115 y 116 de la Ley 20.720, que establecen el marco para este procedimiento.
Este procedimiento, aplicable para grandes empresas, tiene requisitos de información, es decir, solo se nos pide entregar información.
Esta información que se exige a la empresa es un inventario de activos, junto con la documentación pertinente que respalde la titularidad de estos bienes. También se requiere un estado detallado de las deudas, mostrando a quién y cuánto se debe, y una serie de otros documentos que permiten evaluar la situación financiera de la empresa. Este paso es crucial, ya que asegura que todos los interesados, incluidos acreedores y empleados, tengan una imagen clara de la situación patrimonial de la empresa.
Una vez que la empresa presenta su solicitud de liquidación voluntaria, el tribunal competente, que en este caso es un juzgado de letras en lo civil, debe seguir un procedimiento específico. Este incluye la revisión de la solicitud para asegurar que cumpla con todos los requisitos legales y la nominación formal de un liquidador, luego de lo cual, dicta inmediatamente resolución que declara la liquidación de la empresa deudora. De ahi en adelante, el liquidador realizará la incautación, tomará los bienes de la empresa, los venderá y pagará a los acreedores con lo que se junte de esta venta, dejando toda deuda en cero.
La Liquidación Voluntaria Simplificada para PYMEs
La liquidación voluntaria simplificada es un procedimiento especial diseñado para micro y pequeñas empresas (PYMEs) y está regulado en los artículos 273 hasta 281 B de la Ley 20.720, que detallan esta versión «simplificada» del procedimiento de liquidación de grandes empresas.
Para calificar, la empresa debe cumplir con los criterios para calificar como micro o pequeña empresa. Estos criterios incluyen, pero no se limitan a, el tamaño de la empresa en términos de ingresos y número de empleados.
Similar al artículo 115, pero adaptado a las realidades de las micro y pequeñas empresas, se solicita una serie de requisitos de información. Se pide a la empresa que presente una lista detallada de sus activos, así como la documentación que prueba su propiedad. También se requiere un estado detallado de las deudas y otros documentos financieros relevantes. Este paso es fundamental para garantizar que la liquidación se realice de manera justa y equitativa, teniendo en cuenta las particularidades de las empresas más pequeñas.
La gran diferencia con el proceso de liquidación anterior, es que no existe incautación. El liquidador, en cambio, te pedirá que le lleves los bienes de la empresa directamente donde el martillero que los va a rematar.
Implicancias Prácticas y Consejos para Empresas en Quiebra
Más allá de la teoría legal, es crucial entender cómo estos procedimientos impactan en la práctica a las empresas en quiebra.
- Preparación para el Proceso de Liquidación:
- Auditoría Interna: Se recomienda realizar una auditoría interna exhaustiva antes de iniciar el proceso de liquidación para entender completamente la situación financiera de la empresa. No necesariamente hay que estar en números negativos, pues nuestra ley deja la determinación de este a la confesion del deudor. No tienes que esperar números negativos, pues muchas veces esos números negativos son inminentes e irrecuperables y no tenemos por qué esperar que eso ocurra para solicitar la liquidación
- Estudiar la situación de los trabajadores de la empresa: Lo ideal, es finiquitar a todos antes, pero tienes que saber que no necesariamente es asi, y que puedes dejar ese dolor de cabeza y decisión al liquidador.
- Averiguar bien quienes son todos tus acreedores. Acá entran todas las deudas, incluidos impuestos o convenios con el tesorería.
- Consultoría Legal y Financiera: Es vital buscar asesoramiento legal y financiero especializado para navegar este proceso complejo.
- Durante el Proceso de Liquidación:
- Comunicación con tu Abogado y Liquidador: Mantener una comunicación clara y transparente con tu abogado, para conocer tiempos y mantener la gestión del liquidador dentro de plazos normales. No es raro que se demoren más de lo normal, lo importante es conocer los motivos. Con todo, recuerda que ya nadie puede molestarte por las deudas de la empresa una vez que sale la sentencia, y la sentencia sale más o menos al mes de presentada la demanda.
- Entregar los bienes cuando corresponde: En efecto, si esto no es asi, solo demoras tu propio procedimiento.
- Conclusión del Proceso:
- Esperar la resolución de término: Una vez que salga la resolución de termino de administración concursal, tu abogado tendrá que pedir la certificación de ejecutoria de dicha resolución.
- Consideraciones Post-Liquidación: Si quieres limpiar el DICOM de la empresa, puedes borrar las deudas del informe de Dicom o boletín comercial con la resolución anterior.
Conclusiones
El proceso de quiebra de empresas en Chile, regulado por la Ley 20.720, resuelve la complejidad y la dualidad que enfrentan los negocios. Este proceso, marcado por dificultades económicas, no es simplemente el final de una empresa, sino que puede ser visto como una transición hacia un nuevo comienzo, una oportunidad para aprender y crecer. La ley no solo brinda un marco para la equidad y la transparencia en la liquidación de activos, sino que también ofrece un respiro y una oportunidad para reorganizar y replantear el futuro emprendedor, especialmente a través de la liquidación simplificada destinada a las pequeñas y medianas empresas.
La quiebra afecta más que las finanzas de una empresa. Tiene un impacto emocional y social significativo en los empresarios, trabajadoras y sus comunidades. Este es un momento que requiere no solo comprensión legal, sino también empatía y apoyo humano. Es una situación que pone a prueba la resiliencia y fomenta la renovación, donde los empresarios y sus equipos pueden usar la experiencia adquirida para construir un futuro más fuerte y sostenible.
En nuestro rol, nos comprometemos a proporcionar más que solo asesoramiento legal. Ofrecemos una guía basada en la experiencia, entendiendo profundamente los aspectos tanto legales como humanos de la quiebra. Apoyamos a las empresas en cada paso del proceso de liquidación, asegurando que se manejen todos los aspectos con cuidado y profesionalismo.
Mirando hacia el futuro, el final de un proceso de quiebra puede marcar el comienzo de una nueva fase de crecimiento y desarrollo, tanto personal como empresarial. Las lecciones aprendidas durante este tiempo desafiante pueden ser herramientas valiosas para futuras aventuras comerciales y para la adaptación a un mercado en constante cambio.
Si tu empresa está enfrentando desafíos financieros, podemos ayudarte. Te invitamos a contactarnos para explorar sus opciones y comenzar el camino hacia la recuperación y el reemprendimiento. Juntos, podemos transformar los desafíos actuales en los cimientos para el éxito futuro. En resumen, aunque la quiebra de empresas en Chile es una situación desafiante, con el apoyo y la orientación adecuados, puede convertirse en el punto de partida para un nuevo y prometedor capítulo como emprendedor.